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| El régimen franquista, como aquel nazista, en los años de la segunda guerra mundial había actuado a la persecución a los contrarios o hostiles al Nuevo Estado, mediante sanciones económicas, reclusión, o a la eliminación física. La Dictadura se dedicó a reprimir a todos aquellos que no representaban a su idea de una España valiente, “mitad monjes, mitad soldados”.
Durante la República ambos los partidos condenaban la homosexualidad, considerándola en el mejor de los casos una enfermedad de tipo mental. La derecha decía que era un “pecado contra natura”, mientras la izquierda, que era “una muestra de la decadencia burguesa”. Por lo tanto, como primera disposición, el régimen franquista modificó la Ley de Vagos y Maleantes de 1934, declarando la homosexualidad ilegal afermando que lo The text of the law declares that the measures in it "are not proper punishments, but mere security measures, set with a doubly preventive end, with the purpose of collective guarantee and the aspiration of correcting those subjects fallen to the lowest levels of morality. This law is not intended to punish, but to correct and reform".
incluyendo a los gays y lesbianas, bisexuales y transexuales en todas las categorías a reprimir, junto con los “criminales, los mendicantes, los enfermos mentales o físicos." Más tarde, en 1970, la Ley de Peligrosidad y Rehabilitación Social precisó che se tenia que «tratar» y «curar» la homosexualidad.
Es decir, por el simple hecho de ser homosexual, si la policía te pillaba en cualquiera de las muchas redadas en los locales de ambiente, las penas de prisión iban de tres meses, que se aplicaba la mayoría de las veces a cuatro años. A esta condena se solía añadir una de exilio de hasta dos años cuando empiezò a aparecer la casilla de 'homosexual peligroso en las fichas Se cuentan unas 30 o 40 condenas al año. Los gays podían ser enviados a centros de reeducación (más parecidos a campos de concentración): los acusados de pasivos, a Badajoz, y los acusados de activos, a Huelva. En Canarias, la Colonia Agrícola Penitenciaria de Tefía, Fuerteventura, en 1955 fue famosa por lo mismo. Además estos centros, en todas las cárceles grandes había una galería de 'invertidos'. En Carabanchel, era la última planta. En Ocaña, los homosexuales eran enviados a cocina o lavandería en vez de ir a picar piedra.
En lo que se refiere a las lesbianas, eran metidas en manicomios hasta que corrigieran de su “desviación”.
Una vez cumplida la pena, podían ser exiliados de su lugar de residencia a otro lugar, muchas a más de 500 kilómetros. Y además, había que avisar a la Policía de su dirección siempre. Los chantajes eran comunes por parte de cualquiera: desde la policía, hasta a cualquiera que lo supiera, quienes además contaban con la impunidad legal y la aprobación social. De otra manera, qui denunciaba el hecho fuera metido en la cárcel, y por esto motivos muchas personas decidieron de suicidarse.
La persecución no fue sistemática, los que pagaban eran siempre gente muy modesta: camareros, agricultores; los señoritos casi nunca. A veces, cuando un policía quería hacer méritos, detenía a gays pobres.
Después de décadas de uso, la Dictadura consideró necesario abolir la Ley de Vagos y Maleantes, y hacerle unos cambios. El 4 de Agosto 1970 se aprobó la Ley de Peligrosidad y Rehabilitación Social, que sustituye como grupo criminal a “los homosexuales” por “los que realicen actos de homosexualidad”, incluyendo a la pornografía, a los menores de 21 años “moralmente pervertidos”, y el tráfico de personas.
Según los datos del Tribunal Supremo en los años 1970 y 1979, alrededor del 6% de la documentación empezada en estos tribunales lo eran por homosexualidad, aproximadamente 58000 (en un 99% de los casos homosexualidad masculina), y las sentencias condenatorias eran del 5% del total (21000)
La Ley de Peligrosidad Social sobrevivió al franquismo. En 1978 todavía se aplicó oficialmente a tres personas. En total, unos 1.000 homosexuales fueron encarcelados por esta ley, que estuvo en vigor nueve años.
Los homosexuales dejamos de ser peligrosos oficiales en España gracias a la coalición de intereses que se formó en contra de la ley durante la Transición.
El Gobierno ha indemnizado ya a 111 homosexuales que fueron encarcelados durante el franquismo por su condición sexual en aplicación de las Leyes de Vagos y Maleantes y de Peligrosidad y Rehabilitación Social. En base a cuanto tiempo estuvieron en los campos, han recibido de 4000 a 12010 euros. La asociación también destacó que el número de personas que solicitan la subvención es reducido “debido a que se trata de personas mayores o que desconocen su existencia y, en algunos casos, porque han rehecho su vida, actualmente están casados, con hijos, y no quieren que se conozcan estas experiencias”.
Hoy en España, el matrimonio entre personas del mismo sexo es legal desde el 2005, y desde el 2006 los transexuales pueden registrarse con sus sexo preferido en los documentos sin tener che hacer ninguna operación cirugía antes. En el mismo año el Estado permitió a la inseminación artificial por parejas homosexuales y la adopción homoparental. España se puede considerar un Estado donde los derechos de los homosexuales son tutelados más que en otros países del Europa, y por esto motivo en particular Barcelona, se puede considerar unos de los más importantes destinos de turismo homosexual.
Edited by 'monkey - 20/5/2013, 22:33
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